Golondrina rabadilla canela, Petrochelidon pyrrhonota
Es visitante estival
Es visitante estival
Poema de Marcelino M. Román 1944:
Cortando el aire del mundo, veloz, palpitante flecha, enviada del horizonte y del día sin fronteras, desgrana espigas de cielo sobre el amor de la tierra.
Siempre con su vida al viento, siempre con su aire de fiesta y aquerenciada en el aire de las claras primaveras.
Cielo agolpado en las alas, pero cielo de tormenta, mientras una nubecita en el pecho le blanquea.
A veces en alto alambre enfila su gracia trémula, o jubilosa de altura por las alturas pasea, o casi tocando el suelo curiosamente revuela.
Su trino, mensaje tenue, vagas nostalgias despierta, y aletean los ensueños junto a sus alas viajeras.
De las lejanías trae lo que el corazón espera con la emoción de otras gentes y el aroma de otras tierras.
Ella es signo amoroso -internacional y nuestra- que une distintos paisajes y hermana patrias diversas.
Tan juguetona en el viento y tan de la primavera, trae la anunciación dichosa de las albas venideras.
Cortando el aire del mundo, veloz, palpitante flecha, enviada del horizonte y del día sin fronteras, desgrana espigas de cielo sobre el amor de la tierra.
Siempre con su vida al viento, siempre con su aire de fiesta y aquerenciada en el aire de las claras primaveras.
Cielo agolpado en las alas, pero cielo de tormenta, mientras una nubecita en el pecho le blanquea.
A veces en alto alambre enfila su gracia trémula, o jubilosa de altura por las alturas pasea, o casi tocando el suelo curiosamente revuela.
Su trino, mensaje tenue, vagas nostalgias despierta, y aletean los ensueños junto a sus alas viajeras.
De las lejanías trae lo que el corazón espera con la emoción de otras gentes y el aroma de otras tierras.
Ella es signo amoroso -internacional y nuestra- que une distintos paisajes y hermana patrias diversas.
Tan juguetona en el viento y tan de la primavera, trae la anunciación dichosa de las albas venideras.